Tarta rústica de manzana y avellanas. Receta fácil, saludable y apetitosa

Tarta rústica de manzana y avellanas

Si en la entrada anterior presenté una tarta salada hoy vengo con una versión dulce, una tarta rústica de manzana y avellanas que, creo, hará las delicias de muchos.

Tarta rústica de manzana y avellanas

Las manzanas y las avellanas son dos ingredientes muy habituales en la repostería de Asturias, tierra muy querida en mi familia; pocas veces los había probado juntos en una misma preparación por lo que enseguida me puse manos a la obra cuando llegó a mis manos una receta en la que se usaban ambos. El resultado me gustó mucho, me pareció que el sabor intenso de la avellana acompaña muy bien a la manzana que no pierde ni un ápice de protagonismo al emparejarse con el fruto seco, sino que ambos dan lugar a una mezcla de sabores que se diferencian perfectamente a la vez que se complementan. Me gustó tanto que ya he repetido en varias ocasiones siendo esta última la que hice para publicar y de la que obtuvimos unas bonitas fotografías.

Para la realización de esta tarta hay que elaborar o comprar una pasta de avellanas; se elabora fácilmente triturando las avellanas tostadas en un robot hasta que adquieran el aspecto de pasta o mantequilla producto de la liberación de los aceites presentes en el fruto seco; también puede comprarse ya envasada como hice yo por lo que dejo aquí el enlace por si a alguien le interesa comprarla: www.marialunarillos.com/3246-pasta-de-avellana-italiana-150-gr.html.

Para dar ese toque rústico del que hablo en el título de esta receta la envolví en una masa quebrada dulce que hace de cada bocado un crujiente placer. Es una tarta muy de otoño o invierno, de esas que apetece tomar un poco templadas acompañando a una taza de café mientras disfrutamos de esos momentos de tranquilidad que ofrecen las tardes de invierno.

Tarta rústica de manzana y avellanas

La preparación de este postre lleva varios pasos, todos fáciles pero entretenidos. Quizás lo más laborioso sea hacer la masa que debe enfriarse previamente por lo que en caso de no disponer de mucho tiempo siempre podemos usar una masa quebrada comprada. A partir de ahí una mise en place cuidada para que todo lo tengamos ordenado y preparado y nos facilite la elaboración del postre.

Espero que os guste y que sea una más en vuestra lista de favoritas como es ya, de la mía.

Tarta rústica de manzana y avellanas

INGREDIENTES

Para 6 personas

Para la masa:
  • 200 g de harina
  • 120 g de mantequilla blanda
  • 65 g de azúcar glas
  • 20 g de harina de almendras
  • 1 huevo pequeño
Para la masa de avellanas: (si se hace casera)
  • 1 huevo grande
  • 50 g de azúcar
  • 25 g de mantequilla derretida
  • 30 g de pasta de avellanas (si se hace a mano, sacaremos 30 g del resultado de triturar 100 gramos de avellanas tostadas)
Para las manzanas caramelizadas:
  • 4 manzanas reinetas (o Golden)
  • 40 g de mantequilla
  • 40 g de azúcar

Un molde apto para horno de 23 cm preferiblemente de pyrex o cerámica, no desmontable.

Tarta rústica de manzana y avellanas

PREPARACIÓN

Tiempo de preparación: 60 minutos + 50 minutos de horno.

La masa

Batir la mantequilla con unas varillas y en un cuenco hasta que tenga un aspecto de pomada. Añadir el azúcar glas y seguir batiendo hasta que vuelva a quedar en pomada.

Echar las almendras y el huevo y remover de nuevo con las varillas.

Añadir por fin la harina y remover hasta que se forme una masa.

Formar una bola y envolver en film.

Aplastar un poco con la mano para que quede más baja y meter en la nevera durante, al menos, una hora.

Engrasar y forrar el molde con papel apto para el horno.

Encender el horno a 180º

Cuando se saque la masa del refrigerador, se coloca sobre la mesa de trabajo.

Con un rodillo se extiende hasta conseguir un círculo (o la forma que tenga el molde) que cubrirá la base y las paredes del molde.

Este círculo se coloca sobre el molde ya engrasado y forrado.

Con la ayuda de las manos se coloca la masa presionando con los dedos para que se adapte bien a la forma de la base y las paredes.

Se cubre de nuevo con otro papel de horno y sobre este se echan unas legumbres secas o bolas de cerámica para repostería, para que no se levante la masa durante el horneado.

Meter al horno precalentado a 180º durante 10 minutos. Esto se llama cocer en blanco una masa.

Tarta rústica de manzana y avellanas
La masa de avellanas (si se hace casera)

Con unas varillas mezclar el huevo, el azúcar, la mantequilla derretida y la pasta de avellanas. Reservar.

Las manzanas caramelizadas

Pelar y cortar las manzanas en cuartos.

Poner en una sartén o cazuela la mantequilla y el azúcar hasta formar un caramelo.

Colocar los gajos de manzana sobre el caramelo y cocinar a fuego bajo durante 5 o 7 minutos. Apagar el fuego y dejar que se templen.

Una vez fuera del horno el molde contendrá la base de tarta precocida. Se retira el papel que contiene las legumbres secas y se procede con el relleno.

Se deposita sobre el fondo de la tarta la masa de avellanas.

Sobre la masa anterior se colocan los gajos de manzanas caramelizados en forma circular.

Subir la temperatura del horno a 200º.

Hornear durante 40 minutos, calor arriba y abajo y con cuidado de que no se tuesten demasiado las manzanas para lo que podremos poner un papel de aluminio sobre ellas.

Cuando haya pasado el tiempo, sacar del horno y pintar con un brillo de mermelada o si se desea espolvorear de azúcar glas.

Tarta rústica de manzana y avellanas

Más cosas

El molde de una sola pieza, no desmontable, funciona bien si se forra con papel lo que facilita que se pueda sacar la tarta entera sin que se pegue.

Poner un montón de garbanzos o de alubias sobre el papel es un método infalible para que no se eleve la masa al cocerse en el horno.

Para hacer la pasta de avellanas se utilizan 100 g de avellanas ya tostadas y se trituran en varias veces hasta conseguir una consistencia de crema para untar o mantequilla. De esos 100 g utilizaremos 30 g en la elaboración de esta receta.

El calor del horno en la segunda cocción es de 200º aunque aconsejo vigilar la tarta en su proceso de cocción para que no se dore más de la cuenta.

Tarta rústica de manzana y avellanas

Bibliografía consultada

  • La fabrique des tartes. Edit. Marabout. Catherine Kluger.
  • La Escuela de pastelería. Le Cordon Bleu. Edit. Larousse. 5ª Edición.

Comentarios

  1. Hola, es distinta a las que se suelen ver por ahí, seguro que quedó buenísima, enhorabuena por tu web, acabo de descubrirla, un saludo.

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  2. Gracias a ti por visitar el blog.
    Si, es diferente, la avellana es un sabor que podría resultar chocante en principio pero cuando la pruebas con la manzana sorprende gratamente.
    Muchas gracias.

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