Galletas craqueladas de limón
Ayer rescaté una vieja hoja de papel con una receta apuntada por mí hace unos años y que estaba guardada en uno de mis libros de repostería; aprovechando que han bajado las temperaturas he decidido poner el horno en marcha y elaborar una tanda de estas galletas craqueladas de limón, tan bonitas y que sobre todo son un auténtico placer para disfrutarlo en el desayuno o con un café a media tarde.
Es una receta muy sencilla, fácil y con un resultado tan bueno que quizás anime a algunos a adentrarse en el mundo de la repostería; el aspecto es muy vistoso ya que la cobertura que llevan de azúcar glas, debido al calor del horno se abre y como resultado se dibuja esa superficie agrietada que da nombre a estas "galletas craqueladas de limón".
Son tan fáciles de elaborar que es una receta apta para que nos ayuden los niños manchándose las manos de azúcar, como a ellos les gusta, mientras forman bolitas de masa.
Hay múltiples variedades de estas galletas en función de los ingredientes que se usen, así son también muy apreciadas las de chocolate o las de café y vainilla. En otro momento y si me ayudan mis niños, a ver si preparo las de chocolate.
Ahí va mi receta, divertíos haciéndolas; son muy resultonas.
Ingredientes
Para 21 galletas.
- 50 g de mantequilla blanda
- 60-70 g de azúcar
- 1 huevo entero
- 40-50 ml de zumo de limón
- Ralladura del limón
- 150 g harina
- 7 g de polvos de hornear (tipo Royal)
- Pizca de sal
- Azúcar glas
Preparación
Tiempo de preparación: 10 minutos + 1 hora de reposo.
Tiempo de horneado: 12-15 minutos, , total: .
Rallar el limón y extraer el zumo. Reservar ambas cosas.
En un bol, batir la mantequilla con el azúcar con varillas manuales o eléctricas hasta que se forme una crema.
Añadir el huevo e integrar en lo anterior.
Echar el zumo de limón y su ralladura; en este paso igual te parece que se corta la masa, no te preocupes, es así y no afecta en absoluto al resultado final.
Ahora añadir la harina tamizada junto con los polvos y la sal. Integrar todo con las varillas.
Dejar reposar la masa tapada con film, en la nevera, durante 1 hora.
Mientras tanto, encender el horno a 180º.
Sobre una bandeja de horno colocar una lámina de papel de horno.
Preparar un bol con azúcar glas donde rebozar las bolitas.
Coger porciones de masa más o menos iguales, formar una bola con cada porción y rebozar en azúcar glas depositando cada bolita en la bandeja forrada.
Meter al horno precalentado a 180º durante 12-15 minutos, calor arriba y abajo.
Finalmente sacar del horno a una rejilla y en pocos minutos podrás degustarlas.
Más cosas
Cuando coloques las bolitas de masa deja espacio suficiente porque con el calor se expanden un poco y no deben tocarse entre ellas.
El rebozado con azúcar glas debe ser generoso para que cuando se abra el azúcar dé lugar a un bonito dibujo craquelado.
El resultado deberá ser una galleta blandita por dentro y más seca en su cobertura; deben consumirse pronto porque como todas las galletas caseras, tienden a secarse.
El tiempo de cocción es corto, suele estar entre los 12 y los 15 minutos que os he puesto, pero puede variar un poco en relación con el horno que tengamos.